martes, 30 de diciembre de 2008

Un día y poco...

Escribo desde la tranquilidad navideña de mi mesa de oficina. Aunque tenga que venir a trabajar, estos días están siendo como vacaciones. Días de comilonas maratonianas, de árboles y luces de navidad en casa (gràcies, Alba), de reencuentros con la familia que quizás hace tiempo que no ves, pero que alimentas la relación conversando, aunque sea por teléfono...
Aún así, tengo ganas de que lleguen las 12h del mediodía de mañana para irme de vacaciones. Si el tiempo nos lo permite, estaremos celebrando el fin de año fuera (como ya es tradición en mí, después de cinco años), más concretamente en una casa perdida por los Alpes franceses.
Tras estos días dias que he disfrutado al máximo, viene bien reservarse un espacio para una misma, en el que hacer un balance de todo lo que ha pasado durante este año y los deseos u objetivos para el que entra. Sin embargo, en estos días de desconexión, también hay un rincón reservado para todos los que formáis parte de mis años, meses, semanas o días. Gracias por vuestra compañía.

1 comentario:

Alba dijo...

llums de nadal, arbre... espelmes!

a casa tenim de tot! :)